Reseña de Revival

El otro día se cortó la luz en mi casa. Así, de repente. Se escuchó el clásico "zuuuumm" de cuando se corta la energía, junto con los ruiditos de "apagado" de los aparatos eléctricos de mi casa, que son bastantes y pensé "Mierda". Creí que sería uno de esos breves cortes veraniegos, pero duró un día y medio. ¿A qué voy con todo esto? A que aproveché la oportunidad para terminar de leer Revival, la última novela de Stephen "Capo de la vida, master of the universe" King, que había interrumpido tiempo atrás. La termine de leer esa noche, en parte porque lo único que podía hacer a la luz de la linterna, y en parte para distraerme del hecho de que el calor me pone de malas.


No es una obra maestra de King como lo es It, pero tampoco es horrible (como Posesión, la novela espejo de Desesperación) o mediocre (como Mr. Mercedes). Sin spoilear el final, voy a contarles más o menos de qué va. Revival comienza en los '60, cuenta la historia de Jamie Morton y Charles Jacobs. El primero es un niño de campo, el más chico de varios hermanos; el segundo es el nuevo pastor, que ha llegado al pueblo con su joven mujer y su hijito. Un terrible accidente hace que los caminos de ambos se separen, pero a lo largo del tiempo volverán a cruzarse: Jamie devenido en guitarrista de rock adicto a la heroína y Jacobs transformado en un estafador de feria que hace trucos con lo que él llama "electricidad secreta". Pero hete aquí que no son realmente trucos: puede curar heridas y hasta enfermedades terminales como el cáncer -a un precio muy alto-.


La verdad lo leí con bastante interés desde el principio porque la faja prometía "el final más oscuro, inquietante e inolvidable" de todos los libros de King, y eso es un tremendo gancho, considerando que ha escrito cosas muy perturbadoras. Sin embargo, a lo largo de mi lectura llegué a la conclusión de que el problema radica en que tiene una introducción demasiado extensa y un nudo muy demorado. Por lo general los personajes de King le ofrecen al lector un pasado pintoresco y lleno de pequeños detalles que lo hacen creíble, pero en este caso es sencillamente innecesario. La infancia y adolescencia de Jamie (su novia, su trabajo, sus hermanos) apenas tienen relevancia para la trama central, y a pesar de eso son largamente contadas. En cambio, sabemos muy poco de Charles Jacobs, quien aparece de vez en cuando para contar lo justo y necesario. ¿De dónde salió exactamente su interés enfermizo por la electricidad? ¿Cómo aprendió a utilizarla de esa forma sobrenatural? ¿Qué carajo es la electricidad secreta? Nunca lo sabremos, pero sí sabemos que Jamie se garchó a la hija de su compañera de trabajo. Niiiice.


Debido a que se pierde en cuestiones irrelevantes, la historia tarda lo suyo en tomar un rumbo concreto y se estira demasiado. PERO, pero...el final garpa. Es un tanto apresurado para mi gusto, y aunque la promesa de ser EL peor de todos los finales me parece un poco exagerada, es bastante espeluznante. Un último y terrible experimento de Jacobs, ya viejo y al borde de la muerte, lleva a Jamie de vuelta a su ciudad natal para ser testigo de algo terrible. A lo Frankenstein, un rayo descencadena una serie de hechos espantosos que culminan en la rotura del velo del misterio: ¿qué pasa cuando morimos? ¿a dónde van nuestras almas? ¿existe un ser superior?


Con claros tintes Lovecraftianos, no es el peor pero quizás sí el más desolador final de King: es la certeza de que después de la muerte hay algo. Y es malo.

Conclusión: está para leerlo, sobre todo si les gustan los horrores cósmicos. Plus, tiene una pequeña referencia a Joyland, lo cual lo linkea al Gran Universo King Donde pasan Cosas Terribles. Le doy cuatro Alicitas sobre seis.



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