You know, there’s somethin’ powerful about seeing a black man that’s bulletproof and unafraid.
En la vida hay que saber admitir cuando uno se equivoca.
Y yo me equivoqué con Luke Cage.
Cuando vi Jessica Jones quedé desencantada con el personaje. El actor que interpretaba a Cage me parecía infinitamente aburrido, soso, sin chispa. Una masa de músculos (sexy, lo admito) sin gracia. Cuando me enteré de que iba a tener su propia serie creí que iba a ser un desperdicio de recursos, y al ver las primeras críticas me alegré porque eran tan malas como lo había previsto. De esta manera llegué al primer episodio convencidísima de que iba a ser una garcha atómica, que nada podría salvarlo.
Y entonces cambié de opinión. No puedo decir que la serie sea tan buena como JJ o Daredevil, pero no es ni por asomo tan mala como me había parecido que sería. Acá, una reseña libre de spoilers (hasta que indique lo contrario).
Antes que nada, aclaro que jamás leí un cómic de Luke Cage así que no puedo decir si esta versión de Netflix es parecida a la original o no. Mike Colter no es carismático ni lo será nunca, pero no lo necesita. Su Luke Cage es serio, hosco, callado. Y no precisa más que eso.
Un punto flojo es, sin dudas, la cuestión de los villanos. Daredevil tuvo al grandioso Fisk (no hablemos de la segunda temporada....) y JJ tuvo a Killgrave. Cage tiene demasiados enemigos, y no todos alcanzan a ser buenos en lo que hacen. En primer lugar tenemos a Cornell 'Cottonmouth' Stokes (Mahershala Ali), dueño de un local bailable/traficante de drogas-armas/pianista/asesino que en seguida le busca roña a nuestro héroe del ghetto. Cornell está bien construido, y mediante el uso de flashbacks se nos cuenta cómo llegó a ser el negro frío y desalmado en el que se convirtió.
Después tenemos a Mariah Dillard (Alfre Woodard), la prima de Cornell. Si vieron The Wire (y si no la vieron ¿qué carajo están esperando?) hay una similitud entre estos dos personajes y Avon/Stringer Bell. Uno se ensucia las manos y maneja la calle mientras el otro se dedica a estudiar y a hacer negocios sucios con gente de guita. Mariah es más fría que un casquete polar, tiene un cargo político y maneja a la gente del barrio como quiere. Hay una escena de ella en particular donde desata toda su brutalidad que es siemplemente genial.
Ambos buscan deshacerse de Cage haciendo una campaña de difamación en su contra y dejando que la policía se distraiga buscándolo. Acá es necesario señalar algo importante: a diferencia de DD (que usa una máscara para pelear) y JJ (una ebria rencorosa de perfil bajo) Luke Cage no oculta su identidad. No hay caras tapadas ni nombres falsos. Cage se la banca. Claro que esto parece una decisión poco afortunada teniendo en cuenta que los malos saben dónde vive, con quién anda y a qué hora saca a pasear al perro, pero también le hace ganar mucho amor por parte de la comunidad. Hay una parte que me encanta en donde Cage se cruza con Method Man, uno de los miembros originales del famoso grupo de rap Wu-Tang Clan. Ambos se fangirlean el uno al otro (¡Sos un capo! No, ¡vos!) y luego Method Man cuenta ese encuentro en una radio local. Mientras rapea sobre Luke Cage vemos un montaje sobre cómo la gente del Harlem lo protege: todos usan buzos con agujeros de bala para que la policía se confunda y pierda tiempo deteniendo a las personas equivocadas mientras Cage se esconde. Hay que tener huevos para convertirse voluntariamente en un blanco andante delante de la gorra.
¿Y porqué huye, si es inocente de todo? Porque como bien apunta Method Man, ser a prueba de balas viene segundo, primero está el hecho de que es negro. Y al final del día, ser un negro acusado de matar a un policía blanco es muy jodido, seas un superhéroe o no.
Los otros dos villanos que aparecen son Hernán "Shades" Álvarez (Theo Rossi) el matón de Diamonback que ayuda primero a Stokes y luego a Mariah (ahí pasa algo, mmm) y finalmente el mismísmo Diamondback, que acá sería como el final boss, el malo más maloso. Peeeeeero...
INICIO DE SPOILERS
Diamondback (Erik LaRay Harvey) es un villano muy flojo. Al principio de la serie se lo nombra mucho y te hacen creer que es el más capo, pero en última instancia se queda a medias con todo. Resulta ser que es Willis Stryker, un medio hermano de Luke producto de una aventura extra matrimonial de Cage padre con su secretaria. A Willis nunca le dieron el apellido ni lo reconocieron, pero principalmente odia a Luke porque cuando eran jóvenes robaron un auto y Cage padre arregló las cosas para que Luke saliera libre y Willis cargara con las culpas. Así, su bastardo terminó en un centro para delincuentes juveniles en donde luego mató a un tipo (ya no recuerdo bien porqué, sorry) y se cagó la vida. La cuestión es de de ahí en más incriminó falsamente a Luke en todo lo que pudo, lo mandó a prisión y le dió la ocasión de adquirir sus súperpoderes. Pero el personaje en sí no vale mucho, es demasiado exagerado e histriónico, lo cual no pega para nada con los otros villanos más "realistas".
FIN DE SPOILERS
Por último, vienen las aliadas de Luke: Claire (el nexo entre DD, JJ y Luke Cage) y Misty Knight (Simone Missick). De Claire (Rosario Dawson) no puedo decir mucho, es un personaje agradable y ojalá formara una pareja con Cage (sí, ya sé que en los cómics se Luke casa con JJ y tienen un súper bebé, pero francamente no tiene tanta química con Jessica, y de todas formas prefiero a Jones con su hermana adoptiva Patsy, demándenme giles). Misty Knight, por otro lado es...no sé. Está claro que viene a ser el papel femenino fuerte y rudo del lado de los buenos (del otro está Mariah), pero no me termina de cerrar. Se supone que es una súper detective pero la caga todo el tiempo, oscila eternamente entre confiar en Luke y arrestarlo. Entiendo que antes que nada es policía, pero vamos, es irritante que cambie de opinión cada cinco minutos, nunca pida refuerzos y se mande sola creyendo que lo puedo todo. Tal vez en una segunda temporada los guionistas puedan pulir su personaje, pero por el momento queda totalmente relegada frente a las otras mujeres de la serie.
En conclusión, la serie se la banca. Tiene muchos momentos cursis y remanidos, pero aún así es mucho mejor de lo que esperaba teniendo en cuenta la falta de carisma absoluta que tuvo Luke Cage en JJ.Hay acción, hay escenas memorables, y sobre todo hay un fuerte sentido de identidad que ni siquiera DD logró. A mis ojos, da para más. Mucho más.
Y entonces cambié de opinión. No puedo decir que la serie sea tan buena como JJ o Daredevil, pero no es ni por asomo tan mala como me había parecido que sería. Acá, una reseña libre de spoilers (hasta que indique lo contrario).
Antes que nada, aclaro que jamás leí un cómic de Luke Cage así que no puedo decir si esta versión de Netflix es parecida a la original o no. Mike Colter no es carismático ni lo será nunca, pero no lo necesita. Su Luke Cage es serio, hosco, callado. Y no precisa más que eso.
Un punto flojo es, sin dudas, la cuestión de los villanos. Daredevil tuvo al grandioso Fisk (no hablemos de la segunda temporada....) y JJ tuvo a Killgrave. Cage tiene demasiados enemigos, y no todos alcanzan a ser buenos en lo que hacen. En primer lugar tenemos a Cornell 'Cottonmouth' Stokes (Mahershala Ali), dueño de un local bailable/traficante de drogas-armas/pianista/asesino que en seguida le busca roña a nuestro héroe del ghetto. Cornell está bien construido, y mediante el uso de flashbacks se nos cuenta cómo llegó a ser el negro frío y desalmado en el que se convirtió.
Después tenemos a Mariah Dillard (Alfre Woodard), la prima de Cornell. Si vieron The Wire (y si no la vieron ¿qué carajo están esperando?) hay una similitud entre estos dos personajes y Avon/Stringer Bell. Uno se ensucia las manos y maneja la calle mientras el otro se dedica a estudiar y a hacer negocios sucios con gente de guita. Mariah es más fría que un casquete polar, tiene un cargo político y maneja a la gente del barrio como quiere. Hay una escena de ella en particular donde desata toda su brutalidad que es siemplemente genial.
Ambos buscan deshacerse de Cage haciendo una campaña de difamación en su contra y dejando que la policía se distraiga buscándolo. Acá es necesario señalar algo importante: a diferencia de DD (que usa una máscara para pelear) y JJ (una ebria rencorosa de perfil bajo) Luke Cage no oculta su identidad. No hay caras tapadas ni nombres falsos. Cage se la banca. Claro que esto parece una decisión poco afortunada teniendo en cuenta que los malos saben dónde vive, con quién anda y a qué hora saca a pasear al perro, pero también le hace ganar mucho amor por parte de la comunidad. Hay una parte que me encanta en donde Cage se cruza con Method Man, uno de los miembros originales del famoso grupo de rap Wu-Tang Clan. Ambos se fangirlean el uno al otro (¡Sos un capo! No, ¡vos!) y luego Method Man cuenta ese encuentro en una radio local. Mientras rapea sobre Luke Cage vemos un montaje sobre cómo la gente del Harlem lo protege: todos usan buzos con agujeros de bala para que la policía se confunda y pierda tiempo deteniendo a las personas equivocadas mientras Cage se esconde. Hay que tener huevos para convertirse voluntariamente en un blanco andante delante de la gorra.
¿Y porqué huye, si es inocente de todo? Porque como bien apunta Method Man, ser a prueba de balas viene segundo, primero está el hecho de que es negro. Y al final del día, ser un negro acusado de matar a un policía blanco es muy jodido, seas un superhéroe o no.
Los otros dos villanos que aparecen son Hernán "Shades" Álvarez (Theo Rossi) el matón de Diamonback que ayuda primero a Stokes y luego a Mariah (ahí pasa algo, mmm) y finalmente el mismísmo Diamondback, que acá sería como el final boss, el malo más maloso. Peeeeeero...
INICIO DE SPOILERS
Diamondback (Erik LaRay Harvey) es un villano muy flojo. Al principio de la serie se lo nombra mucho y te hacen creer que es el más capo, pero en última instancia se queda a medias con todo. Resulta ser que es Willis Stryker, un medio hermano de Luke producto de una aventura extra matrimonial de Cage padre con su secretaria. A Willis nunca le dieron el apellido ni lo reconocieron, pero principalmente odia a Luke porque cuando eran jóvenes robaron un auto y Cage padre arregló las cosas para que Luke saliera libre y Willis cargara con las culpas. Así, su bastardo terminó en un centro para delincuentes juveniles en donde luego mató a un tipo (ya no recuerdo bien porqué, sorry) y se cagó la vida. La cuestión es de de ahí en más incriminó falsamente a Luke en todo lo que pudo, lo mandó a prisión y le dió la ocasión de adquirir sus súperpoderes. Pero el personaje en sí no vale mucho, es demasiado exagerado e histriónico, lo cual no pega para nada con los otros villanos más "realistas".
FIN DE SPOILERS
Por último, vienen las aliadas de Luke: Claire (el nexo entre DD, JJ y Luke Cage) y Misty Knight (Simone Missick). De Claire (Rosario Dawson) no puedo decir mucho, es un personaje agradable y ojalá formara una pareja con Cage (sí, ya sé que en los cómics se Luke casa con JJ y tienen un súper bebé, pero francamente no tiene tanta química con Jessica, y de todas formas prefiero a Jones con su hermana adoptiva Patsy, demándenme giles). Misty Knight, por otro lado es...no sé. Está claro que viene a ser el papel femenino fuerte y rudo del lado de los buenos (del otro está Mariah), pero no me termina de cerrar. Se supone que es una súper detective pero la caga todo el tiempo, oscila eternamente entre confiar en Luke y arrestarlo. Entiendo que antes que nada es policía, pero vamos, es irritante que cambie de opinión cada cinco minutos, nunca pida refuerzos y se mande sola creyendo que lo puedo todo. Tal vez en una segunda temporada los guionistas puedan pulir su personaje, pero por el momento queda totalmente relegada frente a las otras mujeres de la serie.
En conclusión, la serie se la banca. Tiene muchos momentos cursis y remanidos, pero aún así es mucho mejor de lo que esperaba teniendo en cuenta la falta de carisma absoluta que tuvo Luke Cage en JJ.Hay acción, hay escenas memorables, y sobre todo hay un fuerte sentido de identidad que ni siquiera DD logró. A mis ojos, da para más. Mucho más.
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